Los errores más comunes al negociar la compra de un inmueble encarecen el precio que vas a pagar y pueden darte muchos dolores de cabeza o insomnio. Por eso comparto con vos algunos hábitos para que tus finanzas personales, y vos mismo, no te estreses con este importante evento en tu vida.
No buscar suficiente información
Llegar al momento exacto donde el precio y la forma de pago se discuten sin la suficiente información es un error que puede costarte caro. Tenés que conocer cada arista del tema, como lista inicial para arrancar:
- ¿Inmuebles parecidos están ofertados con las mismas condiciones de pago?
- ¿El estado del inmueble es impecable?
- Si las dos preguntas anteriores podes responderlas afirmativamente multiplica el precio de medio cuadrado por la superficie del inmueble a negociar. No puede haber mucha diferencia entre los ofertados y el que estas negociando. Si la hubiere es momento de preguntarte el motivo.
- ¿Quieren venderlo por urgencias financieras? ¿Esta caro y tenemos margen para solicitar un precio que nos beneficie? ¿Es producto de una herencia? ¿Tenemos todo el dinero que nos piden? En algunos casos si la unidad esta en venta hace mas de un año podemos tomarlo como un indicador de precio de venta elevado.
No mostrar seguridad
La información del punto anterior nos permitirá avanzar sobre cuestiones puntuales y firmes de la compra del inmueble. La información otorga poder de decisión. Y si es la primera vez que te toca afrontar esta situación te brinda mucha mas seguridad. Estará claro el punto a tratar, la parte vendedora intentará obtener la mayor cantidad posible de dinero, vos vas a buscar invertir el menor dinero posible. El foco debe estar puesto ahí, en nada mas.
Actuar con vergüenza
Te conviene construir argumentos lógicos y sustentables a partir de los párrafos anteriores y evitar el “regatear x regatear” mas propio de una feria que de una operación de miles y miles de pesos. En el primer párrafo te pregunté si el inmueble esta en perfectas condiciones. Esto siempre es un punto a tener en cuenta para buscar una variación en el valor del metro cuadrado.
Regatear quizás te de vergüenza pero defender tus argumentos y tu dinero de forma sustentable y lógica te va a resultar muy fácil con investigación previa.
Insolvencia e inflexibilidad
Tener el dinero o el crédito aprobado va a facilitarte la negociación. Si lo tenés plantealo en la negociación. Sino tenes que saber que no contás con la principal fuerza para cerrar esa negociación. En algunas ocasiones mas que el monto final del dinero lo importante pasa a ser la forma de pago y hasta la moneda en que la operación se haría.
Por otro lado cierta inflexibilidad en la fecha de mudanza puede frenar una operación, todo dependerá en que punto pueden encontrarse ambas partes. Modificar los montos de reserva, boleto y escritura puede ser una alternativa para luego modificar el precio final y la fecha de la toma de posesión.
Amigote
Los profesionales de los bienes raíces desarrollan una gran capacidad de persuasión y seducción. Es gran parte de su trabajo por eso tenes que tener en claro que no es un amigo sino que su simpatía es solo una de sus formas de conquistarte como comprador.
Para resumir: El vendedor no es tu amigo, vergüenza, insolvencia, inseguridad e inflexibilidad no son buenas compañeras para esta tarea. Busca mucha información para poder comparar los valores y condiciones de mercado versus el inmueble que estas comprando. Voy a seguir publicando sobre este tema en los próximos meses si querés que me enfoque en algún tema puntual voy a esperar tu comentario acá abajo. Ahora una canción:
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