La bolsa y un casino ¿Qué similitudes podrían tener? Ambas pueden generar adrenalina, excitación, decepción y adicción. No más que eso. ¿Y ganar dinero? Allí radica la mayor diferencia. Los inversores ganan dinero en mediano largo plazo, estando invertidos en el mercado y siguiendo su plan de inversión. Cualquier asistente a un casino sabe que cuanto mas tiempo pase en él, mas chances de perder tiene.
Las rachas positivas y negativas suelen querer emparentar a los casas de apuestas con el mercado de valores. Nada más lejano. Si estas frente a un crupier será su decisión o el azar. Si estas frente tus inversiones solo saldrás con análisis y aprendizaje. Un inversor construye una estrategia para rentabilizar su dinero aprendiendo de sus errores. ¿Es lo mismo invertir que jugar en el casino? Yo pienso que no. Te cuento mis motivos:
Información vs. probabilidad
La inversión en bolsa debe realizarse con una investigación previa. Esa información puede estar formada por análisis fundamental, análisis técnico o ambos. Nada de eso existe en un casino donde lo mas cercano es el método labouchere. Que se llame método esta opción y análisis las otras dos ya marca la suficiente distancia entre ambas. Se analiza información y los métodos intentan volver positivas tus posibilidades.
El análisis técnico tiene como premisa que todos los inversores tienen la misma información para decidir sobre sus acciones y que los precios expresan cabalmente ese momento de la compañía. Si es un buen o mal momento para la empresa esta contenido en los precios de su acción. Es una herramienta eficaz para determinar los momentos de compra y venta de un papel.
El análisis fundamental tiene el lenguaje de los negocios. La contabilidad y las finanzas son las estrellas de esta herramienta para inversores. Para determinar el precio de una acción y su proyección se tienen en cuenta los datos macroeconomicos y microeconomicos vinculados a esta compañía. Es eficaz para determinar el activo exacto a comprar por parte del inversor. Mediante la construcción de esta matriz de análisis el inversor llega a comparar el precio “en los libros” de la compañía con su valor “de mercado” y poder establecer si esta “barata” por ende la compraría o “cara” para venderla. En resumen, en la bolsa prima la información, en el casino las probabilidades.
Rentabilidad versus probabilidad
Nunca sabrás en el casino con cuanto dinero vas a salir. En la bolsa lo podes prever. Tenes la posibilidad de invertir en instrumentos de renta fija que establecen claramente su flujo de fondos durante el tiempo que tiene vida esa inversión. Los instrumentos de renta fija como bonos o letras indican en su prospecto de emisión su tasa interna de retorno, o sea te permite calcular rápidamente cuanto ganarías si invirtieras tu dinero en este instrumento.
Especular no es invertir
Benjamin Graham explica claramente la distinción entre inversor y especulador. Una inversión es aquella operación bursátil en la que luego de realizar un análisis exhaustivo se puede establecer algún margen de seguridad para el “principal” y una adecuada rentabilidad. Si no había un concienzudo análisis previo y ciertos margenes de seguridad Graham las consideraba especulativas. Esta etiqueta no era presentada por él como negativa en sí. Consideraba a los especuladores parte necesaria del mercado. Lo que si le molestaba el accionar de aquellos que creyendo invertir solo especulaban.
Para Graham la percepción social que el mercado de valores es un casino esta fuertemente informada por especuladores no inteligentes que creyeron estar invirtiendo cuando en realidad estaban especulando. Por eso creen sus vaivenes más cercanos al azar de lo que realmente está. Los inversores saben que el riesgo está asociado a la naturaleza misma de la inversión. Por eso el análisis fundamental es una herramienta que todo inversor debe conocer si quiere salir de la mera especulación.
El horizonte de inversión en cualquier mercado de valores es un año. En el casino la próxima bolilla. La especulación es un falso puente entre ambos mundos.
Transparencia versus opacidad
La bolsa es un mercado regulado, con unas leyes y normas que cumplen todos los participantes para evitar ventajas desleales y desterrar a los amigos de lo ajeno. Nada mas distinto que un casino donde es la misma empresa la única garantía de pago y transparencia sin conocimiento cabal de sus normas internas.
Las pantallas en contra
El cine y la televisión han construido una imagen de los mercados de valores que dista bastante de sus jornadas cotidianas. Esa imagen hace que muchos se acerquen y huyan despavoridos ante las primeras pérdidas. Hablé de algunos ejemplos acá y acá. Habrán salido espantados luego de especular y actuar por azar como en un casino. Le habrán dado liquidez al mercado, ese habrá sido su rol. Pero no habrán invertido ni se habrán propuesto generar valor. Apostar por una acción no es invertir ni especular es ¡apostar!
¿Todavía no te convencí? Escuchá el podcast para saber más…
El mercado de valores es un casino invertido, al revés, puesto de cabeza, no gana el impulso ni el azar. Ganan los que mas estudian y toman las decisiones mejor informadas. Aquellos que expresan en sus acciones, en tanto decisión y papel, inteligencia técnica, fundamental y emocional.